Si tienes habilidades como el ser organizada, buena negociadora, paciencia para tratar con diversos proveedores y sobretodo tiempo libre, imagino que estarás, como muchas novias viendo todos los detalles de tu boda.
La planificación de una boda no es una labor sencilla. Debes procurar dejar un margen de error ya que nunca ocurre todo como lo habíamos imaginado. Sea un evento cualquiera o tu propia boda.
Siempre suelen haber olvidos, imprevistos o situaciones que requieren de una pronta acción para evitar que todos los servicios contratados tales como las flores, el fotógrafo, la iglesia aún el transporte sean coordinados en el tiempo esperado para que la misma forma en la que funciona una orquesta perfectamente dirigida, ningún músico desafine.
Recuerda que cuando surge algún problema siempre debe haber una persona disponible y responsable de solucionarlo, muchas veces asignamos a nuestros familiares y amistades tareas que nos ayudaran a disfrutar del momento, pero se hace difícil gozar de la celebración si hay que estar pendientes de cada detalle.
El tener a un experto capaz de coordinar de forma múltiple a los proveedores y lograr que la boda fluya sin contratiempos es una gran ventaja, en un día especial como este. He aquí 9 razones de porque deberías contratar uno.
- Tiempo. Te ahorrarás muchas horas de trabajo necesarias para integrar los innumerables detalles que conlleva la organización de una boda.
- Dinero. Muchos consideran que los organizadores de bodas son un gasto innecesario. Aunque parezca lo contrario, los organizadores de bodas experimentados conocen el mercado de los servicios de boda y a sus proveedores, saben negociar precios, ya que aportan un volumen de negocio importante a éstos, son lo que llamaríamos clientes frecuentes.
- Tranquilidad. El estrés es un factor común en las bodas y este puede producir situaciones explosivas dentro de la propia familia. Tener una persona con habilidades en el manejo de las relaciones personales como mediador, es algo que no tiene precio. Si tú le dejas, evitara situaciones no deseadas.
- Boda de Ensueño. Un buen organizador de bodas capta las ideas de cómo se quiere la boda una vez ha escuchado cuáles son los deseos de la pareja, de ahí que propone soluciones efectivas y mejora tus ideas con su creatividad.
- Asesoría. Por su experiencia conoce las situaciones que pueden repetirse en las bodas, ya que nadie celebra una boda varias veces en un año, el experto sí. Por ende esto le permite asesorar sobre cualquier materia que esté relacionada con éstas, etiqueta, proveedores con trayectoria, últimas tendencias, etc.
- Punto Clave. Donde convergen la coordinación de invitados y proveedores. Cualquier duda se dirigen al organizador quien sabrá evacuar las dudas y responder a las preguntas con acierto, relevando así a otras personas de esta tarea.
- Flujo natural y relajado. La boda debe desarrollarse de manera espontánea e imperceptible, respetando los tiempos necesarios, para que el ritmo sea el adecuado en muchos momentos de la boda, evitando aburrir a los invitados.
- Dirige. Tiene a su cargo todo el proceso desde su inicio con la ceremonia hasta la recepción. Consigue con su profesionalismo y experticia la respuesta a cada situación o imprevisto que se le presente.
- DIVERSION. Libera de forma completa el estrés y permite que la diversión sea total. La idea es que los invitados tenga en su mente una boda memorable por lo bien que se la pasaron.